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El café es una bebida que se elabora a través de la infusión o fermentación de los granos del árbol de café. Contiene un efecto estimulante en el organismo gracias a la cafeína y por esta razón muchos sufren de dependencia o adicción. Si para vosotros esa taza es el impulso de energía y motivación que necesitáis en la mañana, después de la comida y a media tarde… seguid leyendo.

Muchos estudios se han hecho sobre el café y, además de ser una bebida estimulante, tiene otros beneficios para la salud. Resulta que beberlo puede reducir el riesgo de padecer cáncer y diabetes tipo 2 e incluso se ha demostrado que existe una relación entre la cantidad que se consume y la probabilidad de morir por causas generales o específicas.

El problema con el café, en la dieta natural y en la alimentación regular de cualquier persona, es lo que se le añade, puesto que todos estos beneficios se obtienen cuando el café se bebe solo. Añadir cremas, siropes, azúcar o edulcorantes artificiales disminuye al mínimo sus beneficios.

¿Es bueno o malo?

Juzgad ustedes mismos con estos beneficios y riesgos de esta bebida.

Los beneficios:

• Mejora las funciones cognitivas del cerebro, el tiempo de reacción y la memoria a corto plazo.
• Es una ayuda para aquellas personas que sufren e estreñimiento porque estimula el sistema digestivo.
• Un consumo moderado de café puede protegernos de las enfermedades cardiovasculares.
• Tiene antioxidantes.
• Protege el hígado y reduce la probabilidad de sufrir cáncer de hígado.
• Reduce las probabilidades de padecer diabetes tipo 2.

Los riesgos:

• La cafeína puede resultar en ansiedad y depresión.
• La dependencia a la cafeína afecta el estado de ánimo, haciendo más irritables a quienes sufren de adicción.
• Libera las hormonas del estrés: cortisol, norepinefrina y epinefrina que elevan el ritmo cardíaco, la presión sanguínea y la tensión. Incluso puede llevar al aumento de peso, patrones de sueño interrumpidos y un sistema inmunológico deprimido.
• Irrita los tejidos gastro intestinales en personas con problemas gástricos como úlceras, gastritis, síndrome del colón irritable, entre otros.

Bebe café, pero ten cuidado con lo que le añades

Añadir edulcorantes artificiales, siropes, azúcares a porrón, chocolate e incluso alcohol ya no es tener un gusto por el café, si no más bien un paladar por todos esos otros ingredientes. Si por el contrario, el café negro y sin azúcar verdaderamente os gusta, entonces adelante. Siempre y cuando no os excedéis con la cantidad, siendo 3 tazas al día lo máximo de café que se debe tomar.