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Aún no acaba el verano y aún estamos a tiempo de hidratarnos con el típico, clásico y exquisito Gazpacho Andaluz: la sopa fría de tomate y miga de pan con muchas variantes y muy parecida al Salmorejo cordobés.
Dato curioso: hubo que esperar hasta el siglo XIX para que el gazpacho tuviese tomate, porque fue una de las hortalizas que trajo la colonización de América. De hecho, el origen de esta sopa fría es incierto y antes del tomate se preparaba únicamente con pedacitos de pan, aceite, vinagre y ajos.
Si antes era solo una sopa de pan y aceite, agradezcamos que hoy en día es mucho más rica, tanto su sabor como su contenido nutricional gracias a toda la verdura fresca y cruda que se come en una porción de esta sopa.
Gazpacho
Ingredients
- 5 tomates maduros, lavados y cortados en trozos
- 1 pimiento verde cortado en trozos
- 1/2 cebolla
- aceite de oliva
- vinagre de Jerez
- sal al gusto
Instructions
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Colocar en una batidora todos los ingredientes, menos el aceite de oliva, la sal y el vinagre de jerez.
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Licuar en máxima velocidad los vegetales hasta que su textura sea líquida. Disminuir la velocidad al mínimo y, con la batidora encendida en esta velocidad, añadir el aceite de oliva en un hilo.
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Añade un poco de vinagre y una pizca de sal. Licúa todo hasta que esté homogéneo.
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Probadlo y ajustar la sazón a vuestro gusto.
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Servir el gazpacho bien frío con un poco de cebolleta picada por encima.
Así como miles de recetas existen de otros platos, también hay muchas de gazpacho, pero ésta es nuestra versión y nos encanta porque es fresca, nutritiva y su sabor no es demasiado penetrante. ¡Adaptadlo a vuestro gusto!
