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Tu cerebro no necesita azúcar

Tiempo de lectura estimado: 2 minuto(s)

¿Crees que necesitas azúcar para tener energía?, ¿sigues creyendo que desayunar alimentos azucarados te va a hacer rendir más en el día de hoy? Existe la falsa creencia de que algo dulce nos aporta la energía necesaria para nuestro día a día, pero no es cierto. Lo que sí podría ser beneficioso en algunos casos (nunca necesario) es la glucosa, pero no el azúcar.

Es muy importante aprender a diferenciar estos dos términos.

Glucosa vs azúcar

La glucosa favorece muchas de nuestras funciones vitales: aporta energía y la podemos encontrar en frutas y verduras, dos grupos de alimentos que recomendamos siempre. También está presente en legumbres y cereales, aunque estos alimentos no deberían consumirse demasiado por su alto contenido en carbohidratos.  

El azúcar común o sacarosa (glucosa + fructosa) no solo no te aporta nada bueno, sino todo lo contrario. Sí, estás escuchando bien. Para metabolizar el azúcar, el cuerpo tira de nutrientes, minerales (sobre todo magnesio, cromo, calcio, cinc…) y vitaminas (especialmente la vitamina B). Así que al tomarla estamos perdiendo todos esos nutrientes con todos los problemas que ello conlleva.

En nuestra sociedad hay muchas personas con patologías asociadas a la pérdida de esos nutrientes por una ingesta excesiva de azúcar:

Lácteos para los huesos, ¿de verdad?

Hemos escuchado cientos de veces que los yogures son buenos para la salud de los huesos, pero no siempre es cierto. A veces tomar demasiados lácteos provoca precisamente esa debilidad ósea. ¿Cómo es posible?

El azúcar roba el calcio de los huesos y los hace más débiles. Por ello, asegúrate de elegir lácteos sin azúcar, sin sabores, sin edulcorantes…

Hipoglucemias mañaneras

Después de unas horas de ayuno los niveles de glucosa en sangre son bajos, quizá por ello mucha gente decide desayunar alimentos dulces tipo bollos, galletas industriales o cereales.

¡Cuidado! Es importante subir de forma correcta esos niveles de glucosa, por ello, elegir un desayuno adecuado es importantísimo. No vale desayunar cualquier cosa. Te pongo dos ejemplos de dos desayunos diferentes y sus consecuencias en nuestro organismo:

  • Zumo de naranja, galletas y café con leche y azúcar: el azúcar entra rápidamente en el torrente sanguíneo provocando un pico glucémico, un subidón que al cabo de unas horas se traduce en un bajón de energía que se conoce como “hipoglucemia”. Los efectos los vimos en el primer post.
  • Una tortilla con aguacate, una naranja entera y un poco de porridge: la proteína y la fibra de esos alimentos hacen que la glucosa entre en la sangre despacio sin producir picos.

A pesar de que muchos asociamos un zumo de naranja recién exprimido a un desayuno saludable no es así. Y la razón está en el tipo de azúcar que tiene ese zumo. ¡Veamos!

smoothie zanahoria

Tipos de azúcar

El zumo de naranja posee azúcar libre. El azúcar se ha liberado de su matriz. Como consecuencia es menos saciante y, según confirman muchos estudios, pasa antes al torrente sanguíneo. Su contenido nutricional es mucho menor que si comemos la naranja entera. Además, en el caso de elegir un zumo es normal que la ingesta calórica sea excesiva, es fácil beberse 3 naranjas, pero seguramente no tanto comerlas. 

La naranja entera tiene azúcar intrínseco: está en el interior de la naranja y está mezclado con otros compuestos interesantísimos como la fibra, las vitaminas, los minerales, los antioxidantes… Al masticar la fruta, sacia más.

 

Niklas Gustafson
Autor del post
Niklas Gustafson

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