Tiempo de lectura estimado: 2 minuto(s)
Al natural, tostados, en crema… el cacahuete es una legumbre rica en antioxidantes, vitaminas y fibra, y además de estar buenísimo, tiene muchos beneficios para nuestra salud.
Sí, cómo lo habéis leído, es una legumbre y no un fruto seco como se le conoce comúnmente. Y ahora es cuando seguramente os extrañe que propongamos tomar cacahuetes cuando hemos basado nuestro modelo de alimentación tiene sus raíces en la Dieta Paleo, donde no se consumen legumbres, por los problemas digestivos o de gases que suelen causar a mucha gente
La clave es, como siempre os decimos, escuchar a nuestro cuerpo y comer sólo lo que nos sienta bien. Así que, si tenéis comprobado que os sienta bien ¿por qué no tomarlo?
Su consumo es cada vez mayor, pero por desgracia, aún sigue existiendo cierta reticencia a tomar cacahuete, ya que es un alimento con un alto contenido en grasas y de gran aporte calórico, lo cual se mira con recelo por aquellos que aún piensan que el control de peso depende de contar calorías o le siguen teniendo miedo al consumo de grasas.
Este temor se extendió desde hace más de 50 años, cuando diversos estudios, pagados por la industria, defendieron que las grasas son perjudiciales para la salud.
Ya hemos comentado muchas veces que este concepto es totalmente erróneo, ya que a día de hoy contamos con infinidad de estudios independientes que demuestran que sucede todo lo contrario. En este mismo blog podréis encontrar por qué las grasas son beneficiosas para nuestra salud. Pero no solo beneficiosas, también son necesarias. Son la mejor fuente de energía que poseemos y, aunque parezca increíble, son fundamentales para mantenernos en nuestro peso ideal. Pero lo más importante de todo es que, al contrario de lo que nos han vendido, su consumo no es responsable de enfermedades cardiovasculares u obesidad. Por supuesto, quedan excluidas de la ecuación las denominadas grasas “trans”, que son grasas alteradas y no son naturales.
Una vez aclarado el malentendido sobre las grasas y entendida su importancia, vemos como no tiene lógica mantener la reticencia en el consumo de cacahuetes. Pero además de las grasas, el cacahuete tiene muchas otras propiedades.
También es rico en proteína, tiene un gran efecto saciante y es una buenísima fuente de zinc, potasio y omega 3. Además, contienen flavonoides y otros compuestos que hacen función de antoixidantes para el organismo.
También ayuda a reducir el riesgo de sufrir enfermedades metabólicas, como puede ser la diabetes, y favorece el tener menor índice de masa corporal en adultos, tal y como explica este estudio realizado por científicos de Filadelfia.
Los cacahuetes se pueden consumir de muchas formas –tostados, fritos, con sal, etc.–, pero nosotros siempre recomendamos acercarse lo más posible a su forma natural. Una de las mejores y más deliciosas formas de tomar cacahuetes es en crema (o manteca). Ésta la puedes untar en piezas de fruta, ponerla en smoothies o hasta puedes ponerla por encima en los bowls de granola de tus desayunos.
Hacer vuestra propia crema de cacahuetes es sencillísimo, pero si la pereza o la falta de tiempo se apodera de vosotros y no os queda más remedio que comprarla, fijaos muy bien en los ingredientes y en las etiquetas nutricionales, ya que muchas veces se suele cargar al producto de azúcares y aditivos que son perjudiciales para nuestra salud.
Si esta es vuestra opción y preferís comprarla la mejor que podréis encontrar es la nuestra (que vamos a decir nosotros ?). No solo es 100% natural y está hecha exclusivamente con cacahuetes. También son cacahuetes de la mejor calidad y el resultado es cremoso y delicioso como ninguna. ¡Como la que haríais en casa! Saludable, sin gluten, sin azúcar añadido y apta para veganos.
