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El huevo, es un alimento que suelo comer a menudo por no decir todos los días, en tortillas francesas, huevos rotos, siempre con la yema liquida. En ocasiones también suelo añadirlo en los smoothies, en crudo ¡me encanta! Y os preguntaréis… ¿Es sano?  

Hoy os quiero hablar de las propiedades del huevo, un multivitamínico natural ¿Por qué le tenemos tanto miedo? Se habla de salmonelosis y el peligro que conlleva ingerir este alimento en crudo, intentando convencernos de que la comida natural es algo que debemos restringir…   

El miedo de que los huevos pueden obstruir arterias, salmonelosis… Lo que durante miles de años ha sido un alimento nutritivo y fundamental se ha convertido en “el tóxico de la alimentación saludable”. 

Durante décadas, corría el mito de que no debemos comer más de dos huevos a la semana. El huevo fue una de las primeras víctimas del colesterol, más concretamente las yemas. En realidad, el colesterol es un componente vital de las membranas celulares. Entre otras cosas, sana y repara el cuerpo, respalda nuestra función cognitiva y ayuda a nuestros cuerpos a producir vitamina D y hormonas. 

Sin embargo, las investigaciones científicas afirman “No hay un límite recomendado sobre cuántos huevos debería comer la gente”. Los huevos nos proporcionan proteína de alta calidad, así como los nueve aminoácidos esenciales para un crecimiento y mantenimiento óptimos. 

Los huevos nos proporcionan proteína de alta calidad, así como los nueve aminoácidos esenciales para un crecimiento y mantenimiento óptimos. 

Superan a todas las otras proteínas de origen animal y vegetal. La proteína tiene grandes propiedades, como ser el macronutriente que más eficientemente satisface el apetito, también reduce la secreción de grelina (la hormona que estimula el hambre). Hay estudios que afirman que las mujeres que comían huevos para el desayuno se sentían más llenas y consumían menos calorías durante el resto del día y durante las siguientes 36 horas. 

Los huevos se conocen como “píldora multivitamínica de la naturaleza”, ya que, contienen vitaminas A, D, E y una variedad de vitaminas B, en cantidades significativas. Así como minerales:  calcio, fósforo, zinc, selenio, potasio, sodio, cobre, yodo, magnesio y hierro; y micronutrientes vitales, colina, lecitina, luteína y zeaxantina. En resumidas palabras ¡Un superalimento! 

¿Son realmente, los huevos, una fuente principal de intoxicación?

El estudio que se ha hecho confirma que “las medidas que han tomado, desde la vacunación para mejorar la higiene en granjas y un mejor transporte, han reducido drásticamente los niveles de salmonella en gallinas” 

La salmonera es cosa del pasado, ¡no te limites! El regreso de las yemas en crudo ya es una realidad.