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¿Dónde puedo incluir proteína en polvo?

Tiempo de lectura estimado: 2 minuto(s)

Todos hemos escuchado los innumerables beneficios de consumir proteína en polvo: repara el tejido muscular, fortalece huesos y tendones, da elasticidad a la piel, mejora la salud del pelo y las uñas, aporta energía…  Beneficios especialmente interesantes si practicas algún deporte:

  • justo después de entrenar, los músculos necesitan proteínas para reconstruirse.
  • la proteína proporciona energía sin los picos de glucosa que causan otros snacks como el pan o la bollería.

Y lo bueno es que hoy en día ya no es necesario comer un filete de ternera o un plato de guisantes para obtener esa cantidad de proteína, sino que existe esta interesante opción de la proteína en polvo. Es súper versátil ya que la podemos incluir tanto platos dulces como salados. ¡Te voy a contar mis opciones preferidas para añadir a proteína en polvo! 

¿Dónde incluyo la proteína?

Batidos: Son una opción muy buena ya que son fáciles de llevar a cualquier parte y también fáciles de digerir y de asimilar. Solo tienes que disolver la proteína en agua, leche, yogur o bebida vegetal. También puedes añadir alguna fruta, semillas o frutos secos para incrementar su valor nutricional.  

Bizcochos, crepes y tortitas: La proteína en polvo posee una textura similar a la de la harina, por ello podemos sustituir parte de la harina por la proteína y obtendremos muchas ventajas: estamos sumando proteína a la receta final, tampoco necesitamos endulzar demasiado la masa ya que la proteína ya tiene un toque dulce y además la proteína en polvo tiene menos carbohidratos que la harina habitual que usamos en los bizcochos. 

Snacks para llevar: Seguro que has escuchado hablar de las Energy Balls, pequeñas bolitas repletas de energía y de ingredientes saludables. Si a la masa de frutas, frutos secos, semillas… le metemos proteína en polvo, la dosis de energía se multiplica.  

Helados: Un postre delicioso y refrescante con un plus de proteína para darte energía, ¿se puede pedir algo más? Solo tienes que mezclar la leche con la proteína y luego añadir tu fruta preferida. Batir bien y al congelador.

Galletas: Son uno de los postres que más me gusta cocinar por la razón de que es imposible encontrar una galleta de supermercado que sea saludable: todas tienen un exceso de azúcares, de grasas de mala calidad como el aceite de palma y de calorías vacías. Siempre tengo un frasco de galletas caseras en casa y una cosa que me encanta es combinar la proteína en polvo sabor chocolate con la avena del mismo sabor. Mira la receta

Porridge: Al clásico desayuno inglés de gachas de avena solo debes añadirle la proteína en polvo cuando la avena esté remojándose en el fuego junto a la leche y el resto de ingredientes que hayas decidido añadirle.

Mermelada: La proteína en polvo es una manera estupenda de sumar nutrientes a la receta. Yo suelo elegir una proteína del sabor de la fruta que he elegido para hacer la mermelada. Mira este ejemplo, la frambuesa con proteína en polvo del mismo sabor potencia mucho el resultado final.

Proteína en polvo de sabores

Yo te aconsejo que elijas una proteína en polvo con sabor, como has podido ver en los ejemplos anteriores, así le podrás dar un plus a tus recetas. Las que siempre tengo a mano son las de chocolate, vainilla y frambuesa.

¡¡¡Ojo!!! Revisa la etiqueta de tu proteína, muchas marcas incluyen azúcares y endulzantes artificiales. Lo ideal es que su sabor dulce proceda únicamente de sus ingredientes naturalmente presentes.

Tipos de proteína en polvo

Una vez más, la calidad es importantísima. De hecho, si investigas verás que hay muchos tipos de proteína en polvo y entre unas y otras hay grandes diferencias de precio. Yo siempre apuesto por fórmulas altas en proteínas, bajas en carbohidratos con perfiles de BCAA (aminoácidos de cadena ramificada) hechas para estimular la síntesis de proteínas y fortalecer tejidos musculares.

  • Proteína whey: lo que más me gusta es su sabor y, por supuesto, que está libre de gluten. Además, procede del suero de la leche de vacas que pastan libremente en Irlanda. Tiene una pureza es del 90%, frente al 80% de media del resto de proteínas del mercado.
  • Proteína vegana: perfecta para los que han descartado los animales de su dieta. Estas proteínas se elaboran a partir de vegetales o cereales como la quinoa, los guisantes, el arroz o la semilla de cáñamo, una combinación baja en carbohidratos y rica en enzimas, vitaminas y minerales.

 

Niklas Gustafson
Autor del post
Niklas Gustafson

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