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Hoy celebramos La Almudena y considero que no hay forma mejor de celebrar esta fiesta que comiéndose unos churros caseros. Hoy os enseñare a preparar unos churros artesanales paleo con ingredientes totalmente naturales. Por supuesto, se trata de una receta sin gluten. Por tanto, los celíacos también podrán disfrutar de estos deliciosos lazos.
Churros caseros
Ingredients
- 2/3 taza agua
- 1 taza harina de tapioca
- 1/4 taza harina de almendra
- 20 gr mantequilla
- 1/4 taza harina de coco
- 2 huevos
- 1 pizca sal
- aceite de oliva virgen extra (para freír los churros)
Instructions
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Calentar abundante aceite en una cazuela o sartén profunda a fuego medio.
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En otra cazuela, calentar el agua y la mantequilla. Cuando eche a hervir el agua, retirar la mezcla del fuego.
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Añadir a la mezcla de agua y mantequilla todos los ingredientes secos (las harinas y la sal). Mezclar hasta obtener una pasta homogénea.
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Insertar la mezcla en una manga pastelera con punta de estrella para obtener la forma característica del churro.
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Formar tiras o lazos con la masa. Lo podéis hacer directamente sobre el aceite o en un recipiente aparte. Si los hacéis en un recipiente aparte, os recomiendo que los trasladéis al aceite con ayuda de una espátula. Así, no perderán la forma.
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Dar la vuelta a los churros en el aceita par que se doren uniformemente.
Notes
Espero que disfrutéis de El Día de la Almudena con estos churros artesanales paleo aptos para celiacos e intolerantes al gluten. ¡Están buenísimos! Si no disponéis de una manga pastelera, no os preocupéis. Podéis formar bolas pequeñas de masa y freírlas de la misma forma. Obtendréis unos deliciosos buñuelos de churo. ¿A qué estáis esperando para poneos con las manos en la masa?
La clave: aceite de oliva de calidad
Mucha gente espolvorea los churros con azúcar. Pero, yo creo que lo más interesante de esta receta, es el sabor al aceite de oliva virgen extra que retienen después de la fritura. Por esta razón, os aconsejo que procuréis freírlos en aceite de oliva de buena calidad. No solo este aceite es más estable, en términos de temperatura, sino que tiene un sabor riquísimo. Desde luego marca la diferencia entre unos churros y otros.
Si no os podéis resistir a añadirles dulzor, os recomiendo que optéis por la versión natural de los edulcorantes disponibles. En lugar de utilizar azúcar refinado, aprovechad los endulzantes orgánicos para beneficiaros de sus propiedades. El azúcar de coco o la miel de caña son opciones mucho más saludables. Sin embargo, tratad de no abusar de ellos para no ingerir demasiados hidratos de carbono.